Esta es una pregunta curiosa que ha despertado la imaginación de muchas personas. ¿Qué pasaría si alguien libera el 100% de su capacidad cerebral? Es decir, que pudiera utilizar la totalidad de las funciones de su cerebro.
La respuesta a esta interrogante ha sido alimentada en gran medida con toda clase de historias de ciencia ficción a lo largo de los años. En donde muestran que las personas que logran aumentar su porcentaje, se vuelven una especie de super humanos.
En algunas ocasiones, la realidad super la ficción, pero no en esta ocasión: en realidad, hay mucha información falsa al respecto. De hecho, es posible que te defraudes un poco al conocer la verdad detrás de todo.
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¿Usamos el 100% de nuestro cerebro?
Todo comenzó con la vieja creencia que nuestro cerebro solo utiliza entre el 10% y 20% de nuestra capacidad cerebral. Por lo tanto, que existe un enorme potencial desperdiciado que podríamos llegar a utilizar.
Pero esto es falso, en realidad si utilizamos la totalidad de nuestro cerebro. Cada uno de los componentes en ella tiene una función distinta, como podemos ver en la siguiente imagen.
¿De dónde surgió este mito?
Lleva tantos años entre nosotros, que es difícil rastrearlo. Pero varias personas, que han estudiado toda esta controversia por años, piensan que lo mas probable es que haya comenzado con una historia de William James.
Este hombre, que es considerado el padre de la psicología en Estados Unidos escribió en 1906 el libro “Las energías del hombre”. En él, escribió una línea muy famosa, en la que habla sobre que “Solo usamos una pequeña parte de nuestros recursos físicos y mentales”.
Con esta dio a entender que había mucho potencial desperdiciado y el resto es historia.
Esta información fue recogida por varios autores y ampliada. Una de las más conocidas es la citada por Lowell Thomas , escritor del prólogo de “Como ganar amigos e influir en las personas”, en donde textualmente comentaba que usamos solo el 10% de nuestro cerebro.
Datos que explican porque si usamos todo el cerebro.
Un daño en el cerebro, en cualquier parte, repercute.
Una de las pruebas más simples es tomar en cuenta lo que sucede si tenemos algún daño en cualquier parte del cerebro. Si eso ocurre, tendremos lesiones que repercutirán directamente en nuestra salud mental.
Si realmente usáramos menos del 20% de la totalidad, dañar ciertas zonas simplemente no causaría ningún impacto en el resto del cuerpo.
Nuestro cerebro gasta mucha energía.
De hecho, es casi el 20% de la energía total de nuestro cuerpo la que es invertida para que el cerebro funcione. Piensa que si usaras menos del 10% de su capacidad, ¿para qué necesitaría tanta energía?
Pruebas en neuroimagen.
Esta es la prueba más definitiva y científica de todas. ¿En qué consisten estas pruebas? En ella, se muestran las zonas en las que nuestro cerebro tiene actividad al estar realizando diversos tipos de funciones.
Gracias a ellas, se ha podido comprobar que en nuestro cerebro tenemos actividad en todas partes. No se encuentran trabajando todas de manera simultánea, pero no queda parte de nuestro cerebro desperdiciado.
Y si, también es un meme.
Esta frase de usar el 100% de la capacidad cerebral se ha vuelto famosa por otros motivos: es un divertido meme.
En estas viñetas, se muestra de forma humorística como sería la vida de alguien que estuviera usando tal capacidad cerebral. Y casi siempre, en forma de super poderes o de conocimiento extraordinario.
Usamos todo nuestro cerebro, de eso no cabe duda. En definitiva hay personas más inteligentes que otras, pero no está relacionado con porcentaje de uso.
Nuestro cerebro es aprovechado en su totalidad, cada parte tiene funciones especiales.