¿Qué pasa si un objeto imparable choca con un objeto inamovible?

Esta es una famosa paradoja que puede dejar pensando a una persona por varios segundos. Habla sobre que pasaría si un objeto imparable termina por chocar con un objeto inamovible. Lo que parece algo sencillo, te puede dejar pensando.

La respuesta es sencilla: no, no pueden existir ambos objetos en el mismo universo. Porque ambos son mutuamente excluyentes. Por lo tanto, esta paradoja simplemente te dejará pensando, pero la respuesta correcta es que no puede pasar esta situación.

Porque ambos objetos son mutuamente excluyentes por completo.

¿Qué se busca con esta paradoja?

que pasa si un objeto imparable choca con un objeto inamovible

Rastrear el origen de esta paradoja es casi imposible. Ha existido en la cultura popular desde hace muchos años y siempre termina por causar largos debates sobre lo que en realidad quiere decir.

Se busca ponernos a reflexionar, porque a priori pensamos que habrá una respuesta correcta donde uno mueve al otro. Es decir, un escenario donde el objeto inamovible es movido u otro donde el objeto imparable es parado.

Por lo tanto, buscamos una respuesta tomando en cuenta todos los elementos que conocemos del universo.

Por ejemplo: ¿un objeto imparable tiene que ir muy rápido o está impulsado por una fuerza desconocida para nosotros? Hasta ahora, pensamos que lo más rápido que existe es la velocidad de la luz.

Y a pesar de lo rápido que es, pues tiene un límite. No puedes recorrer el universo al instante. Llegamos a la conclusión que es un objeto que no puede existir, o al menos, no algo que se encuentre al alcance de nuestro conocimiento.

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Vamos con el objeto inamovible. ¿Qué puede existir en el universo conocido que sea imposible de mover? Hasta donde alcanza el pensamiento humano, no puede existir algo así. El movimiento es parte del universo mismo.

¿Cuál es el sentido de esta paradoja?

Debido a que no podemos hablar con el creador de esta misma, podemos llegar a una conclusión: para generar debate y reflexión. Para intentar hacernos pensar.

Ya que puede llegar a generar conversaciones muy interesantes, que terminen por hacernos estrujar el cerebro buscando respuestas.

Por lo tanto, no es raro que muchos debates sobre este tópico hayan terminado en nada.